Se cumplen 18 meses de
guerra en Ucrania
La guerra a gran escala en Ucrania llega ya a los 18 meses. Hemos sido testigos de numerosos ataques contra zonas pobladas que se han cobrado la vida de menores y personas adultas, han dejado a cientos de personas heridas o gravemente angustiadas y han dañado o destruido viviendas, sumiendo a miles de familias en la incertidumbre.
Las víctimas infantiles en Ucrania aumentaron en más de un 7% entre mayo y agosto en comparación con los cuatro meses anteriores, al triplicarse los ataques aéreos y con drones, sin que el peligro al que se enfrentan los niños y niñas tras 18 meses de guerra haya llegado a su fin.
Desde mayo de 2023, un total de 148 niños y niñas han muerto o resultado heridos en Ucrania, lo que eleva a más de 1.700 el número de víctimas infantiles desde la escalada bélica del 24 de febrero del año pasado, según datos de la ONU. Esta cifra incluye 545 fallecimientos, de los cuales 24 niños y niñas perdieron la vida este verano.
En uno de estos ataques, la mañana del 31 de julio, un misil alcanzó un bloque de apartamentos en Kryvyi Rih, al sur de Dnipro, destruyendo cinco plantas de un rascacielos. En el incidente murieron una niña de 10 años y su madre, y se registraron más de 80 víctimas, entre ellas cinco niños heridos.
A continuación, puedes escuchar las declaraciones de Lyudmila sobre los terribles hechos:
Conocemos a la directora de Save the Children en Ucrania
Sonia Khush es la directora de Save the Children para Ucrania, con sede en Kiev. Anteriormente, ella era direcotra de la respuesta humanitaria en Siria, y ha trabajado en varios lugares de Oriente Medio entre 2015 y 2022.
“Realmente disfruto del ritmo rápido del trabajo. La complejidad, la impredecibilidad y la necesidad de tomar deciciones rápidas. Siempre sentí que estaba participando en eventos que cambiarían el mundo, para bien o para mal, y encontré un lugar donde podía desempeñar un papel activo para ayudar a los niños y la niñas afectados por eventos profundos y transformadores”, cuenta Sonia.
¿Qué es lo mejor de tu trabajo?
Es cuando tengo que ir a visitar a nuestros programas y puedo hablar con personas que se están beneficiando de nuestro trabajo y me encanta escuchar algo sobre sus vidas. Aprender acerca de cómo el conflicto les ha cambiado la vida y ayudar en sus necesidades es lo más satisfactorio de mi trabajo.
¿Cuáles son algunos de los desafíos?
Todas en el equipo que tengo aquí vivimos en esta situación de conflicto desde hace al menos un año y medio.
Han tenido que recoger pedazos de sus vidas y encontrar la energía y el coraje para regresar y ayudar. Todo el mundo está cansado y estresado. Sus reservas mentales se ven desafiadas todo el tiempo, por lo que mantenerlos motivados, entregandos y con calidad es un verdadero desafío, porque realmente se trabaja con comunidades que se han visto muy afectadas.
¿Qué consejo tienes para las personas que quieren ser profesionales humanitarios?
¡Buena suerte! Creo que hay mucho potencial en este campo para aprender, para tener experiencias increíbles conociendo gente realmente maravillosa, pero asegúrate de que sea adecuado para ti.
Hay que tener sentido del humor porque casi nada sale como lo planeas, pero eso es solo una parte de la vida de las personas que se dedican al trabajo humanitario.
Nuetra ayuda a la infancia en Ucrania y en Europa
Llevamos operando en Ucrania desde 2014, prestando ayuda humanitaria a niños, niñas, adolescentes y sus familias afectados por las hostilidades. También prestamos apoyo a familias de refugiados en toda Europa y ayuda a los niños y niñas a acceder a la educación y a otros servicios esenciales.