Informe
El camino hacia
La Recuperación
Más de 142 millones de niños y niñas viven en zonas de conflicto de alto riesgo. Estimamos que 24 millones de esos menores podrían estar experimentando altos niveles de angustia y sufrir trastornos de salud mental que necesitan un nivel adecuado de atención médica. A pesar de estos números tan abrumadores, la salud mental y el apoyo psicosocial no cuentan con la suficiente consideración y se consideran solo los efectos más tangibles de una guerra.
La salud mental de los niños y niñas se ve afectada por los conflictos armados de varias maneras: la exposición directa a conflictos violentos, la falta de acceso a servicios básicos como salud, educación y nutrición, el mayor riesgo de violencia en el hogar, la escuela y entre compañeros, la inseguridad general y el miedo al futuro y la falta de redes de apoyo y cuidadores.
Apoyar a niños y niñas
Nuestro informe ‘El camino hacia la recuperación’ deja en evidencia los efectos sobre la salud mental en los niños y las niñas que viven en zonas de conflicto y el papel de la educación para responder a estas problemáticas.
Responder a las necesidades inmediatas de la infancia es solo una parte de la solución. En última instancia, los niños en conflicto deben estar mejor protegidos y las instalaciones educativas, como las escuelas y los espacios seguros para la infancia, pueden garantizarles a los niños y niñas el acceso a relaciones de apoyo con especialistas, maestros y miembros de la comunidad, así como una mayor sensación de estabilidad.
Descargar informe ’El camino hacia la recuperación’: