Save the Children lanza “Rompo el silencio” para denunciar los abusos sexuales en la infancia

  • Una de cada dos denuncias interpuestas por abusos sexuales tienen a un menor como víctima
  • Tan solo un 15% de los casos son denunciados y de los que entran en el sistema legal el 70% nunca llega a juicio oral

Spot, vídeos y fotos de la campañahttps://prensasavethechildren.smugmug.com/Nacional/Violencia/Rompo-el-silencio/n-DQcbN2/

Madrid, 4 de octubre de 2018. Save the Children presenta hoy la campaña “Rompo el silencio” con el objetivo de sensibilizar a la población sobre el dolor que han vivido y siguen viviendo muchos niños y niñas en nuestro país y para pedir mayor protección para las víctimas. La organización denuncia que su sufrimiento sigue permaneciendo oculto en numerosas ocasiones debido a la soledad en la que se ven sumidas quienes lo sufren, así como por el encubrimiento de personas e instituciones que no detectaron o no denunciaron los abusos.

La campaña quiere además hacer un llamamiento a toda la población para que sume su apoyo solidarizándose con las víctimas y reclamando al Gobierno que apruebe, dentro del proyecto de Ley de Protección Integral frente a la Violencia contra la Infancia, medidas específicas de lucha contra el abuso sexual a menores.

Save the Children agradece la generosidad y valentía de quienes sufrieron abusos en su infancia y están ahora visibilizando su experiencia. “Sus testimonios son una muestra inequívoca de que existe una problemática arraigada en nuestra sociedad. Los abusos hacia niños y niñas se han dado en todo tipo de ámbitos a lo largo de las últimas décadas, pero persisten en la actualidad ya que seguimos sin las herramientas jurídicas necesarias para garantizar la protección de los menores”, explica Andrés Conde, director general de Save the Children.

Uno de los testimonios incluidos en “Rompo el Silencio” es el de Emiliano. Él empezó a sufrir abusos sexuales por parte de un sacerdote en el seminario donde estudiaba cuando tenía 10 años. Cada noche le horrorizaba ser el elegido. El miedo, el dolor y la vergüenza de lo que sufrió durante años acabaron con su infancia y marcaron su vida adulta. Emiliano tiene hoy 52 años y hasta hace dos no fue capaz de romper el silencio para contar y denunciar lo que vivió cuando era pequeño.

“Quiero decirles a todos mis compañeros de seminario que, por favor, rompan su silencio. No por ellos, sino porque si ellos callan, también están encubriendo. Yo posiblemente también me considere encubridor. Porque desde los años en los que salí, en el 79, en los 80, me he callado y he encubierto. Y por eso ahora mismo también vuelvo a decirlo: rompo el silencio y espero que mucha más gente rompa el silencio conmigo”, asegura Emiliano en una entrevista con Save the Children.

Nadia rompe el silencio de forma pública por primera vez para denunciar la violencia que sufrió por parte de su padre. "En casos de abuso sexual en el hogar todo es mucho más complicado. Primero tienes que ser consciente de la situación, después tener el valor de comunicárselo a tu familia y, finalmente, dar un paso más... Y normalmente es tu palabra contra la suya, no tienes nada a lo que te puedas agarrar. Hay mucho desamparo".

Gloria Viseras, ex gimnasta que denunció a su entrenador Jesús Carballo por abusar sexualmente de ella cuando era una niña, considera que "la ley actual protege al abusador porque tiene en cuenta los aspectos administrativos y no los aspectos emocionales de la persona que sufre la violencia" y defiende que "la ley debería estar orientada a que las víctimas puedan romper el silencio".   

Una Ley urgente

El pasado 7 de septiembre el Gobierno aseguró en la rueda de prensa celebrada tras el Consejo de Ministros que remitirá al Congreso de los Diputados en el segundo trimestre de 2019 el anteproyecto de Ley de Protección Integral frente a la Violencia contra la Infancia, que contemplará medidas para luchar contra el abuso sexual. “Sin embargo, la urgencia de la situación exige que los trámites se aceleren para poder contar con su aprobación lo antes posible. Todos los grupos parlamentarios deben comprometerse a respaldar su aprobación, enviando de esta forma un mensaje de unidad y de compromiso hacia un problema que, por incomprensible que parezca, no es percibido todavía con la magnitud que representa por gran parte de la población”, añade Conde.

Save the Children pide que la Ley de Protección Integral frente a la Violencia contra la Infancia contemple, entre otras, las siguientes medidas:Que se garantice la educación afectivo sexual en la enseñanza reglada y desde edades tempranas.

  • Que se incluya la formación sobre violencia y protección de la infancia en los currículums formativos de maestros, profesores y directores de centros educativos y se dote a todos los colegios de un protocolo de detección y gestión de casos de violencia contra la infancia.
  • Que se cree una Fiscalía específica de violencia contra la infancia y juzgados de instrucción especializados en este tipo de violencia.
  • Que se dé prioridad a la tramitación de los procedimientos de abusos a menores y se incluya formación específica a todos los profesionales involucrados en el proceso.
  • Que se fortalezcan y amplíen los recursos autonómicos de tratamiento y atención especializados y sean públicos y gratuitos.
  • Que los plazos de prescripción de los delitos sexuales cometidos contra menores de edad se activen cuando la víctima cumpla 50 años.

Sobre Save the Children

Save the Children es la organización independiente líder en la defensa de los derechos de la infancia en todo el mundo. Trabaja en más de 120 países salvando vidas, proporcionando seguridad y protección a los niños y las niñas y defendiendo sus derechos en el marco de la Convención sobre los Derechos del Niño de Naciones Unidas.

En España trabaja desde hace más de 20 años con programas de atención a los niños y niñas más vulnerables, centrados en la infancia en riesgo de pobreza o exclusión social. A través de sus programas en España, proporcionan una atención integral a los niños, niñas y sus familias para que la situación económica o de exclusión social en la que viven los niños no les impida disfrutar plenamente de sus derechos y puedan alcanzar el máximo de sus capacidades.