Durante el año 2012 (el último del que se tienen datos) se registraron más de 9.000 notificaciones de maltrato en el RUMI (Registro Unificado de Maltrato Infantil), que depende del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. Este dato es solo la punta del iceberg, ya que la mayoría de los casos de violencia contra la infancia permanecen ocultos.
Save the Children comparece hoy en la “Subcomisión para abordar el problema de la violencia contra los niños y las niñas del Congreso de los Diputados”, donde ha pedido una Ley Integral para abordar este problema.
En España, la violencia contra los niños continúa siendo una realidad poco documentada. No hay ningún organismo de recopilación, análisis y gestión de datos sobre la violencia contra la infancia ni existe una definición de violencia que recoja todas sus formas, dejando fuera la violencia institucional o la ejercida a través de las nuevas tecnologías.
“Se tiende a pensar que violencia es solo maltrato físico, pero la violencia contra los niños va más allá. Las humillaciones, los insultos, las amenazas, el abandono afectivo o la falta de cuidados también son formas de violencia”, explica Ana Sastre, Directora de Sensibilización y Políticas de Infancia de Save the Children.
España es parte de los principales acuerdos internacionales sobre derechos del niño, que obligan a los estados a proteger a la infancia frente a cualquier tipo de violencia. Sin embargo, tanto la normativa estatal como autonómica presenta muchas carencias, no sólo en el ámbito de la protección sino también en la prevención, detección y en la reparación del daño en situaciones de violencia.
“Es alarmante, por ejemplo, que aún no se haya prohibido el castigo físico por parte de los padres y madres en la legislación española, lo que tiene importantes consecuencias en la percepción de la sociedad sobre la violencia. Está socialmente aceptado que cuando el niño se porta mal se le puede pegar y es deber del Estado prohibirlo expresamente en el Código Civil”, añade Sastre.
En su comparecencia, Save the Children ha pedido que se cree una Ley orgánica de medidas integrales para combatir la violencia contra la infancia que:
- Identifique las distintas formas de violencia, incorporando la definición de Naciones Unidas.
- Defina las situaciones de riesgo y promueva políticas de prevención e intervención.
- Refuerce las funciones del Observatorio de Infancia y establezca un sistema único y eficaz de recogida de datos y análisis.
- Establezca un mecanismo obligatorio de evaluación de políticas de protección contra la violencia y rendición de cuentas periódico ante el Parlamento.