Save the Children asegura que la peor sequía en Somalia en una década pone en riesgo la vida de millones de personas hambrientas

 

Material audiovisual para medios de comunicación: https://bit.ly/34MZEYs 

El análisis de la ONG de más de 12.000 personas de 15 de las 18 regiones de Somalia revela que el 70% de los hogares no tienen suficientes alimentos y cerca de 700.000 camellos, cabras, ovejas y vacas murieron por causas relacionadas con la sequía en dos meses

Mogadiscio, 10 de febrero de 2022. Somalia está experimentando su peor sequía en una década, con millones de personas que pasan hambre y se ven obligadas a abandonar sus hogares en busca de alimentos y agua, según Save the Children. La organización asegura que el impacto en las familias se está sintiendo más severamente esta temporada debido a las numerosas y prolongadas sequías, el empeoramiento de la situación de seguridad, las plagas de langostas en las zonas desérticas, el aumento de los precios de los alimentos, la reducción de las remesas y, por último, una cada vez menor cantidad de dinero comprometida por los donantes internacionales.

Sequía en Somalia

 

El análisis realizado por Save the Children, dado a conocer hoy y realizado en noviembre de 2021, abarcó 15 de las 18 regiones de Somalia y comprobó que la mayoría de las familias se estaban quedando sin comer de forma regular. Además, casi el 60% de los hogares evaluados informaron que al menos una persona en su familia había perdido su fuente de ingresos, en gran parte debido a la muerte a gran escala del ganado, y en más de un tercio de los hogares contaba con al menos una persona que no había comido nada en las últimas 24 horas.

Somalia ha experimentado tres grandes crisis de sequía en la última década: en 2011/12, 2016/2017 y la actual, iniciado el año pasado. En la crisis de la sequía de 2011/12, cuando la ONU declaró una hambruna en Somalia, unos 3,7 millones de personas experimentaron niveles críticos de inseguridad alimentaria. Una respuesta global lenta a las primeras advertencias de esa hambruna provocó que al menos 260.000 personas, la mitad de ellas menores de 6 años, murieran de hambre o de complicaciones derivadas de ella en todo el Cuerno de África. Al final de la crisis, los donantes solo habían cubierto el 56% de la petición de financiación que la ONU estableció para cubrir las inconmensurables necesidades en Somalia.

En la crisis de sequía de 2016/17, más de 2,9 millones de personas sufrieron inseguridad alimentaria de nivel de crisis a emergencia. Una respuesta global más rápida y sustantiva permitió salvar vidas. Al final de la crisis, los donantes habían cubierto el 68% del nuevo llamamiento de financiación de la ONU.

Este año, las últimas proyecciones de seguridad alimentaria muestran que 4,6 millones de somalíes enfrentarán inseguridad alimentaria de nivel de crisis a emergencia de febrero a mayo de 2022. De manera crítica, solo el 2,3% de la petición actual de la ONU para responder a la crisis ha sido satisfecha por los donantes.

“Los donantes tienen un margen estrecho para prevenir un gran desastre humanitario en Somalia. Fracasamos en 2011, aguantamos en 2016/17 y ahora parece que hemos vuelto al punto de partida. Nos preocupa que vayamos a retroceder, a una situación de 2011, donde perecieron cientos de miles”, explica Mohamud Mohamed, director de Save the Children en Somalia. “Nos preocupa que el contexto político a nivel mundial esté eclipsando el sufrimiento humanitario del pueblo somalí”, añade. 

Omar es un padre de una aldea en el distrito de Beledweyne, en el sur de Somalia. Omar ha contado a Save the Children que solían alimentar a los niños y las niñas tres veces al día, pero ahora es difícil alimentarlos incluso dos veces, por lo que en su mayoría es una comida al día. “Fuimos capaces de sobrevivir durante la sequía anterior, pero esta es peor que nunca y el agua es más difícil de encontrar. No tenemos comida y el ganado se está muriendo”, cuenta.

Se necesitan al menos 1.500 millones de dólares para proteger a la infancia vulnerable y a sus familias en Somalia, así como brindarles los alimentos, la atención médica, la educación y el agua que necesitan para superar esta crisis.

Save the Children insta al gobierno de Somalia a priorizar la respuesta humanitaria y garantizar que los estancamientos políticos internos actuales en el país no obstruyen la entrega de ayuda humanitaria urgente.

La organización está trabajando para ayudar a las comunidades afectadas en Somalia a hacer frente a los efectos humanitarios inmediatos de la sequía. Está proporcionando suministros de agua de emergencia, tratando a los niños y las niñas que están desnutridos, apoyando los sistemas educativos para que no pierdan el aprendizaje básico mientras están desplazados por la sequía, administrando instalaciones de salud y brindando apoyo en efectivo y medios de subsistencia a los más vulnerables.

SOBRE SAVE THE CHILDREN

Save the Children es la organización independiente líder en la promoción y defensa de los derechos de niñas, niños y adolescentes. Trabaja en más de 120 países atendiendo situaciones de emergencia y programas de desarrollo. Ayuda a los niños y niñas a lograr una infancia saludable y segura.

En España trabaja desde hace más de 20 años con programas de atención a los niños y niñas más vulnerables, centrados en la infancia en riesgo de pobreza o exclusión social. A través de sus programas en España, proporcionan una atención integral a los niños, niñas y sus familias para que la situación económica o de exclusión social en la que viven los niños no les impida disfrutar plenamente de sus derechos y puedan alcanzar el máximo de sus capacidades.