Save the Children alerta de que 1 de cada 3 desplazados climáticos son niños y niñas

.Abandonan sus hogares por la creciente intensidad y frecuencia de eventos climáticos extremos

Londres, 29 de octubre de 2021 - El aumento de las temperaturas, la subida del nivel del mar y la degradación de la tierra obligaron a abandonar sus hogares a un número récord de 10 millones de niños y niñas el año pasado.

Un nuevo informe de Save the Children, publicado antes del inicio de la COP26 de cambio climático, destaca que la migración inducida por el cambio climático es ya una realidad y va a empeorar mucho: 30 millones de personas, de las cuales un tercio son niños y niñas, se ha visto obligadas a abandonar sus hogares en 2020 debido a desastres relacionados con el clima, tres veces más que los desplazados por conflictos y violencia. Hace cinco años, el número de personas desplazadas internamente por desastres relacionados con el clima era de 19 millones. 

El informe también destaca otra tendencia: en 2020 habrá el doble de personas afectadas por sequías de evolución lenta que por tormentas repentinas, y es mucho más probable que la migración provocada por las temperaturas extremas, la subida del nivel del mar y la salinización de las tierras agrícolas sea permanente. Sin embargo, gran parte de esta migración permanente se dirige a zonas que corren el mismo o mayor riesgo de verse afectadas por los factores climáticos.  

El estudio se basa en las conclusiones de más de 420 informes de investigación sobre el cambio climático y el desplazamiento de los niños y niñas, de 125 expertos, y entrevistas con 239 niños y niñas que viven en entornos de alto riesgo climático en cinco países de los cinco continentes -Fiji, Iraq, Malí, Mozambique y Perú-, algunos de los cuales han migrado debido al cambio climático.

La infancia asegura que la crisis climática tiene un impacto devastador en sus vidas y que se ven obligados a desplazarse de las zonas rurales a las urbanas y a veces viajando solos. Algunos mencionaron que los riesgos climáticos estaban aumentando sus niveles de pobreza, dejándolos "atrapados" en lugares de alto riesgo. Algunos niños y niñas se saltaban las comidas, no iban a la escuela, se dedicaban al trabajo infantil, a la mendicidad callejera o se veían abocados a la explotación sexual o al matrimonio infantil.

"La escala de la crisis es enorme, y crece rápidamente. Es una tormenta perfecta que debemos detener, antes de que sea demasiado tarde. Antes, el cambio climático solía provocar desplazamientos de corta duración y las familias regresaban cuando el ciclón o la inundación habían pasado. Ahora, debido a la frecuencia de las catástrofes naturales y a la lenta degradación, vemos cada vez más migraciones permanentes, con muchos niños y niñas que no pueden o no quieren volver. Nunca podrán volver a sus casas”, señala Steve Morgan, director de la Iniciativa de Migración y Desplazamiento de Save the Children.

"El año pasado y en 2018, muchas casas se derrumbaron debido a las fuertes lluvias. Si llueve demasiado, nuestros campos se inundarán, por lo que la cosecha no será buena, y la gente se verá obligada a buscar otras soluciones para alimentar a sus familias. Pero eso no es posible todo el tiempo, así que la única solución es abandonar esta zona tan hostil", cuenta Ousmane (14 años) de Malí.

En todo el mundo, más de mil millones de niños y niñas viven en zonas con alto riesgo de inundaciones, sequías graves u otras amenazas climáticas lo que pone en peligro sus vidas.

"El cultivo de la copra es una de las cosas más importantes de nuestra vida. Es nuestra fuente de ingresos... pero debido al cambio climático, puede haber pérdida de ingresos. Decidí mudarme para tener una mejor educación y una vida mejor", asegura Matila (15 años) de Fiji.

Otra reciente investigación de Save the Children, revelaba que los niños y niñas nacidos en 2020 se enfrentarán, de media, siete veces más olas de calor abrasador, 2,6 veces más sequías, 2,8 veces más inundaciones, casi tres veces más pérdidas de cosechas y el doble de incendios forestales que sus abuelos y abuelas si se cumplen los compromisos acordados en París en 2015.

Pero la urgencia de la situación se ha visto acentuada por este último informe “Walking into the Eye of the Storm: How the climate crisis is driving child migration and displacement” que muestra que el cambio climático no solo está aumentando la probabilidad de desplazamientos, sino que está expulsando directamente a las personas de sus hogares a través de fenómenos meteorológicos extremos más intensos que interrumpen los servicios, dañan las infraestructuras y destruyen los medios de vida. 

El informe también destaca que los niños y las niñas tienen más probabilidades de verse afectados físicamente por los fenómenos relacionados con el clima que los adultos, siendo más sensibles a la desnutrición y a las infecciones. También se enfrentan a amenazas para su salud mental y a un mayor riesgo de violencia, incluido el reclutamiento por parte de las milicias armadas.

"Los niños y sus familias a menudo se trasladan a zonas que son igualmente de alto riesgo, y reciben poco apoyo para desarrollar su resiliencia e integrarse en sus destinos. Está claro que muchas de las respuestas actuales a la migración y el desplazamiento relacionados con el clima no son sostenibles ni adecuadas", concluye Morgan.

Save the Children insiste en que actualmente la mayoría de las políticas nacionales sobre desplazamientos no consideran que los acontecimientos relacionados con el clima sean un factor desencadenante de los mismos, algo que debe cambiar. 

La organización pide al sector humanitario y a los Gobiernos que:

- incorporen la experiencia climática y los riesgos asociados en los programas relacionados con la migración y el desplazamiento de los niños y las niñas; 

- prioricen los derechos y las necesidades de la infancia afectada por la migración y los desplazamientos climáticos, garantizando que la legislación, las políticas, las estrategias y los diferentes planes aborden de forma integral el impacto del cambio climático en los niños y las niñas;

- preparen un movimiento proactivo, planificado y sensible a la infancia dentro de las respuestas nacionales a la migración y el desplazamiento relacionados con el clima, y no sólo el apoyo reactivo para el desplazamiento no planificado;

- aprovechen el análisis predictivo y la experiencia en previsión para llevar a cabo una planificación de escenarios a largo plazo para la migración y el desplazamiento de niños y niñas en entornos climáticos de alto riesgo, junto con respuestas para mejorar la acción temprana o anticipada;

- establezcan alianzas con especialistas en migración y desplazamiento y con los Gobiernos nacionales para avanzar en la recopilación y el intercambio de datos desagregados sobre la migración y el desplazamiento infantil relacionados con el clima; y

- establezcan foros para que los niños y las niñas compartan sus experiencias de desplazamiento relacionado con el clima, se apoyen mutuamente y contribuyan a los procesos de toma de decisiones y planificación.

Sobre Save the Children

Save the Children es la organización independiente líder en la defensa de los derechos de la infancia en todo el mundo. Trabaja desde hace más de 100 años para asegurar que todos los niños y niñas sobreviven, aprenden y están protegidos. Actualmente la organización opera en más de 120 países.

En España trabaja desde hace más de 20 años con programas de atención a los niños y niñas más vulnerables, centrados en la infancia en riesgo de pobreza o exclusión social. A través de sus programas en España, proporcionan una atención integral a los niños, niñas y sus familias.