Materiales audiovisuales para medios: Ponencias - Centro de prensa - Save the Children España
Madrid, 13 de febrero de 2025 - Uno de cada seis niños y niñas vive en una zona de conflicto en el mundo. Este es uno de los alarmantes datos de nuestro informe "No a la guerra contra la infancia", que presentamos ayer en el Congreso de los Diputados. En el informe evidenciamos el impacto devastador de los conflictos armados en los niños y niñas de todo el mundo y analizamos el número de violaciones graves que sufren. Desde Save the Children alertamos sobre la necesidad de medidas concretas para proteger a la infancia de la violencia, los desplazamientos forzados y las graves vulneraciones de derechos en zonas de guerra.
El acto contó con la presencia de representantes de Save the Children España y México, parlamentarios y miembros de la sociedad civil. La intervención inaugural fue a cargo de Francina Armengol, presidenta del Congreso de los Diputados, que reafirmó la necesidad de compromiso para garantizar el futuro de la infancia.
Pilar Kaltzada, presidenta de Save the Children España, apuntó: “Me gustaría trasladar dos mensajes: urgencia y responsabilidad. Nunca hemos vivido un año peor para la infancia en zonas de conflicto. Debemos parar la escalada de violencia contra la infancia y debemos hacerlo ya”.
Según nuestro informe, solo en 2023, 473 millones de niños y niñas han vivido en zonas afectadas por la guerra, viéndose expuestos a graves riesgos físicos y psicológicos.
En el acto intervino Anastasia, una niña ucraniana que a sus 14 años ha vivido el impacto de la guerra en Ucrania y que actualmente reside en España. Con voz firme relató su experiencia: “De repente, comenzó a sonar la alarma. Yo empecé a despertar a mi familia con mucho miedo. Estaba llorando y cogí a mi peluche favorito y nos fuimos al refugio. Estuvimos durante toda la noche en el refugio. Intenté dormir, pero no podía porque tenía miedo de que pasara algo. En ese momento, mi madre decidió que nos íbamos para España”.
Anastasia lanzó un llamamiento a los presentes: “Les pido que ayuden a las personas, y sobre todo a los niños y niñas que han pasado y siguen pasando por esto porque es una experiencia muy difícil que te marca para toda la vida. Y también que piensen en lo que se sufre al pensar en la familia que ha quedado en el país y no puedes ver, ni abrazar, ni besar”.
El director de programas internacionales de Save the Children,Vicente Raimundo, destacó la importancia de actuar: “No es seguro que las víctimas, las niñas y niños atacados o perseguidos, reclutados a la fuerza o violentados, sobrevivan, encuentren paz o recuperen su dignidad. No es seguro que lleguen a ser las personas que en realidad son. Lo que sí es seguro es que el mundo es hoy mejor porque hubo personas que supieron que nada de lo bueno conseguido estaba para siempre protegido, que todo lo logrado bien podía ser fugaz”.
Nicolás Castellano, periodista de internacional de Cadena SER, moderó la sesión ‘Mecanismos e instrumentos para la protección de la infancia en contextos de conflicto’. Para la dimensión legal, contó con la presencia de Ruth Abril Stoffels, experta independiente en la Agencia Ejecutiva de Investigación de la Unión Europea, y Profesora de Derecho Internacional y Relaciones Internacionales. Ernesto Granillo, Especialista en Políticas y Defensa en la Sección de Políticas Humanitarias, oficina de Programas de Emergencia de UNICEF en Nueva York, abordó la dimensión política. Fatima Andraca, directora de programas y respuesta humanitaria, de Save the Children México, explicó la dimensión humanitaria.
Andraca, por su parte, aseveró: “Los trabajadores humanitarios tenemos el reto de traer la voz de las personas y colectivos con los que trabajamos. Los resultados son completamente alarmantes: no son solo cifras. Reflejan lo que vemos todos los días”.
Los representantes de distintos partidos políticos compartieron sus reflexiones y coincidieron en la importancia de actuar con urgencia.
Además del análisis de la situación, Save the Children presentó una serie de recomendaciones dirigidas a los gobiernos, incluyendo el refuerzo de la protección de niños y niñas en contextos bélicos, el aumento de la financiación a la ayuda humanitaria y la persecución efectiva de los crímenes de guerra contra la infancia. La organización defiende que el mundo no se puede permitir que la infancia sea víctima de guerras.