El coste de la crianza en Euskadi ha aumentado un 13% en sólo 2 años, alcanzando 866€ al mes por hijo o hija

  • Save the Children recoge en su nuevo informe que el coste medio mensual de la crianza en Euskadi ha aumentado especialmente por la subida en los gastos relativos a la vivienda (21%) y los alimentos (25%).

  • Los hogares con niños y niñas son los más afectados por la evolución de los precios, con una “inflación específica de la crianza” que supera ampliamente en un 35,5% a la inflación general.

  • La organización pide que la prestación de carácter universal ya existente en Euskadi de 0 a 3 años se amplie hasta los 17 años inclusive.

Bilbao, 3 de diciembre de 2024. El coste de la crianza ha aumentado significativamente en Euskadi, alcanzando un promedio mensual de 866 euros por hijo o hija en 2024, lo que representa un incremento del 13% respecto a 2022. Así lo evidencia el estudio “El coste de la crianza en Euskadi 2024”, que ha presentado hoy Save the Children, y que analiza todos los costes que conlleva tener un hijo o hija en la CAPV.

Para 29.307 hogares, los más empobrecidos, es directamente imposible cubrir este gasto, incluso dedicando el total de sus ingresos a ello. Además, el 42 % de las familias en Euskadi, 89.675, tienen dificultades para cubrirlo, ya que el coste de criar a un hijo o hija representa más de la mitad de sus ingresos, un aumento de 2 puntos porcentuales respecto a 2022. “Si analizamos el porcentaje de ingresos que los hogares deberían invertir en el cuidado de sus hijos e hijas vemos que más de la mitad de las familias en Euskadi no cuentan con ingresos suficientes para cubrir el coste de la crianza o tiene dificultades para cubrirlo, lo que pone en riesgo el bienestar de sus hijos e hijas”, ha explicado Irati Álvarez, responsable de Incidencia Política de Save the Children en Euskadi.

El aumento de estos costes en la crianza se debe principalmente a la inflación, que ha afectado de forma significativa a los bienes y servicios esenciales, como los suministros del hogar y los alimentos. Los gastos que más han aumentado desde 2022 son los relacionados con los suministros de la vivienda (21%) y la alimentación (25%). Con independencia del ciclo económico, los hogares con niños y niñas son los más afectados por la evolución de los precios, con una “inflación específica de la crianza” que supera en un 35,5% a la inflación general. 

En Euskadi el 10,2% de los niños, niñas y adolescentes menores de 14 años vive en situación de pobreza de mantenimiento, esto es, que no disponen de ingresos suficientes para hacer frente a sus necesidades básicas (EPDS, 2022). Y según la última Encuesta de Condiciones de Vida de 2023 (ECV 2023), y uno de cada cinco niños, niñas y adolescentes en Euskadi (el 18,8%) se encontraban en riesgo de pobreza o exclusión social.

 

Mayor riesgo de pobreza: familias con menores de 18 años y monomarentales

En un contexto de crecimiento generalizado de rentas, los indicadores de pobreza se han reducido en 2023 para casi todos los grupos de edad y tipos de hogar. Sin embargo, la brecha entre hogares con y sin niñas/os se agranda, ya que en el caso de personas menores de 18 años o en los hogares con hijas e hijos, los indicadores de pobreza empeoran. El porcentaje de familias con hijos o hijas que se encuentran en riesgo de pobreza o exclusión social en Euskadi es del 18% cifra que se duplica en el caso de las familias monomarentales, alcanzando un 36% (AROPE, 2023).

 

La alimentación y la vivienda, gastos claves

Los gastos corrientes en la vivienda y en la alimentación son de los que más han aumentado en Euskadi, con un incremento en la vivienda del 21% desde 2022 y del 11% desde 2018 y un 25% en la alimentación desde 2022 y del 42% desde 2018.

Rut, madre de una niña de 12 años, cuenta que “es inviable tener una hipoteca y más de un hijo o hija. No me extraña que la gente no pueda tener porque el sueldo no se equipara con el nivel de vida.”

 

De promedio, el coste adicional con respecto a la vivienda cuando nace un niño o niña asciende a 158 euros al mes. En total, los gastos relacionados con la vivienda, sumando suministros del hogar, ascienden a 211 euros mensuales por hijo o hija. Este aumento significativo en los costes de vivienda contribuye a la carga económica general que enfrentan las familias, especialmente aquellas con ingresos limitados.  En cambio, el promedio en el gasto a la alimentación asciende a 147 euros al mes.

 

El coste de la crianza por edades

El coste de criar a un niño o una niña varía significativamente según la etapa de la infancia o adolescencia. De 0 a 3 años el coste mensual es de 674 euros. Las principales partidas con mayor peso en el coste de la crianza en esta franja de edad son la conciliación, la vivienda (adaptar el espacio a un nuevo miembro) y la alimentación. De los 4 a los 6 años el coste mensual es de 848 euros. 

De los 7 a los 12 años se alcanza la máxima cifra, con un coste mensual de 911 euros. En la habitación se hacen algunos cambios para dejar de lado algunos muebles. Los niños y niñas ya comen más cantidad de alimentos y se han incorporado totalmente a la dieta de la familia. De los 13 a los 17 años el coste mensual es de 925 euros. Los niños y niñas han dejado los juguetes de lado y el ocio se realiza con amigos y amigas, o a través de dispositivos tecnológicos.

 

La importancia de reforzar las políticas públicas de apoyo a la crianza 

El estudio muestra una preocupante tendencia: la pobreza infantil es estructuralmente más alta que la que afecta al resto de la población. En Euskadi, la reforma del sistema de Renta de Garantía de Ingresos (RGI) en 2022, junto con la incorporación del IMV y medidas específicas como las ayudas para la crianza de menores de entre 0 y 3 años (200€/ mes por hijo/hija), han contribuido a incrementar los ingresos de las familias y mejorar su situación. Sin embargo, la evolución de los principales indicadores de pobreza infantil nos muestran que las medidas tomadas, siendo positivas, no son suficientes.

 

El informe concluye con varias recomendaciones para aliviar el coste de la crianza y mejorar la efectividad, como aumentar la inversión pública en infancia, reforzarlos mecanismos de apoyo focalizado a familias como la RGI, el IMV o sus complementos de infancia, ampliar las políticas universales de apoyo a la crianza de 3 a 17 años inclusive, vincular las actuaciones de las prestaciones a indicadores del coste de la crianza, garantizar el acceso a una vivienda digna y asequible y desarrollar la Garantía Infantil concretando un plan operativo específico en Euskadi.

Además, Save the Children recuerda la importancia de continuar desplegando medidas de apoyo focalizado a los hogares más vulnerables, poniendo a la infancia y sus condiciones socio-materiales en el centro de la acción política a todos los niveles.

 

Más información

Esta es la tercera edición del informe “El coste de la crianza” realizada por Save the Children. La primera se realizó en el 2018, tras años de una larga recesión que minó de forma severa las rentas de los hogares con menores de edad. En 2022, tras la pandemia, la organización realizó una segunda edición. La crisis de precios desatada a principios de dicho año, especialmente en los productos alimentarios y energéticos, hizo oportuno revisar cómo habían afectado a los hogares con niños y niñas ese periodo de inflación.