Madrid, 31 de agosto de 2018. El próximo 2 de septiembre se cumplen tres años de la muerte de Aylan Kurdi, el niño refugiado sirio de tan solo tres años cuyo cuerpo sin vida fue hallado en las costas de Turquía. Desde entonces, tal como señalan los datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), la cifra de niños y niñas ahogados cuando trataban de llegar a las costas europeas, no ha dejado de aumentar.
Foto: Gabriele F. Casini/Save the Children
Save the Children alerta de que al menos 640 niños migrantes y refugiados han muerto en el Mediterráneo desde 2014, pero la organización recuerda que esta cifra podría ser mucho mayor ya que muchas de las desapariciones que se producen no están certificadas ni documentadas. Los últimos datos muestran que, en lo que llevamos de 2018, 1.549 personas han muerto tratando de llegar a Europa, de las cuales 64 eran niños y niñas.
España, con el 42 por ciento de todas las llegadas durante el año, ha recibido la llegada de personas migrantes por vía marítima en agosto en un volumen que supone más del doble que el de Grecia y más de cuatro veces el de Italia.
La organización advierte que los niños y niñas migrantes y refugiados, especialmente los que viajan solos, son los más vulnerables en estos desplazamientos por mar y tierra frente al riesgo de sufrir explotación, violencia y tráfico de personas.
“Es necesario que el Gobierno lidere un cambio de políticas migratorias que permita a los niños y niñas refugiados buscar protección en Europa a través de vías legales. No podemos permitir que más niños sigan poniendo en riesgo sus vidas en el mar o en manos de las mafias”, reclama Andrés Conde, director general de Save the Children.
En los dos últimos días han comparecido en el Congreso el nuevo Ministro de Interior y la Ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, para exponer la respuesta del nuevo Gobierno a las últimas llegadas, así como la estrategia que éste pretende seguir a partir de ahora. Tras las menciones realizadas a una efectiva gestión de las migraciones y la necesidad de mejorar el procedimiento de asilo, Save the Children recuerda al Gobierno la necesidad de establecer vías legales y seguras para que los niños migrantes y refugiados puedan solicitar asilo en los países de origen o tránsito, evitando así que tengan que poner en riesgo sus vidas en el mar.
“La mitad de las personas que requieren protección internacional son hoy niños y niñas; de lo que hagamos con ellos dependerá, en buena medida, el futuro tanto de sus países de origen, si algún día pueden y quieren volver, como de las propias sociedades de acogida”, recuerda Conde.
Save the Children pide al Gobierno español:
- Incorporar a las administraciones locales y autonómicas. Contar desde el momento de la primera acogida con las capacidades que las administraciones locales y autonómicas puedan ofrecer para una acogida exitosa. En este sentido, es necesario conectar las autorizaciones de entrada para protección internacional con los recursos extraordinarios que las administraciones locales y autonómicas, junto con la sociedad civil, estén dispuestas a ofrecer.
- Implicar a la sociedad civil. Conectar las capacidades de acogida de la sociedad civil y las ONG, especialmente en la atención a la infancia, con los procesos de reubicación y reasentamiento.
- Optimizar las vías para el acceso seguro a España. Promover los visados de estudios, los visados de empleo altamente cualificado y los humanitarios.
- Velar para que en España se aplique el ordenamiento jurídico en el sentido más favorable a los demandantes de asilo, especialmente la infancia. El marco normativo europeo, y con él el marco español, está en proceso de cambio. Impedir retrocesos en relación con la garantía de derechos, a la vez que velar en España por la aplicación de la norma en el sentido más favorable a los demandantes de asilo, especialmente de la infancia, y aumentar las capacidades efectivas de acogida, con la participación de las Comunidades Autónomas, los Ayuntamientos y la sociedad civil.
Sobre Save the Children
Save the Children es la organización independiente líder en la defensa de los derechos de la infancia en todo el mundo. Trabaja en más de 120 países salvando vidas, proporcionando seguridad y protección a los niños y las niñas y defendiendo sus derechos en el marco de la Convención sobre los Derechos del Niño de Naciones Unidas.
En España trabaja desde hace más de 20 años con programas de atención a los niños y niñas más vulnerables, centrados en la infancia en riesgo de pobreza o exclusión social. A través de sus programas en España, proporcionan una atención integral a los niños, niñas y sus familias para que la situación económica o de exclusión social en la que viven los niños no les impida disfrutar plenamente de sus derechos y puedan alcanzar el máximo de sus capacidades.