Abrimos dos espacios seguros para jóvenes migrantes sin familiares en España
Cuando se es un adolescente o joven migrante que vive en España sin familia o lejos de ella, no es fácil salir adelante. Si además hay pocos recursos para atender a la juventud migrante extutelada, la situación se complica todavía más. Los adolescentes y jóvenes que migran sin referentes familiares se enfrentan a realidades que los fuerzan a crecer y convertirse en adultos más rápido de la cuenta, en un momento vital en el que aún están creciendo y desarrollándose, lo que les expone a situaciones de mucho riesgo y a un sistema que muchas veces les deshumaniza. Muchos de estos chavales acaban viviendo situaciones muy duras: durmiendo en la calle o en casas sin luz ni agua, en situación administrativa inestable, comiendo una vez al día y sin familia o redes de apoyo más allá de sus amigos, muchas veces en su misma situación.
Garantizar protección y derechos a niños, niñas y jóvenes
Nuestros “espacios seguros” en nuestro país nacen como parte de un proyecto piloto financiado por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, mediante fondos europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
El objetivo es garantizar la protección y los derechos de las personas menores de edad no acompañadas recién llegadas a España, con una metodología de probada eficacia que pueda replicarse fácilmente. Los dos espacios seguros inaugurados en Gran Canaria y Málaga se enmarcan este este proyecto. El de Las Palmas ha atendido desde su apertura en diciembre de 2022 a 60 chicos migrantes de entre 18 y 23 años, que acuden regularmente a este centro. El centro andaluz ha atendido a su vez a otros 70 jóvenes.
Ayudarles a conseguir su mejor integración
Estos espacios pretender ofrecer un espacio de escucha y acompañamiento a través de actividades lúdicas que buscan su bienestar, protección e integración en la sociedad. Un pilar fundamental en la forma de trabajar en ellos es el enfoque comunitario. Esto significa que implicamos a las instituciones y servicios de cada zona para coordinar todo lo posible la atención a los chicos y chicas, y así conseguir su mejor integración en la sociedad de acogida.
Para lograrlo, contamos con un equipo multidisciplinar compuesto por especialistas en mediación intercultural, derechos de infancia, atención psicosocial y acompañamiento jurídico.
En ellos, con un lenguaje cercano, se les informa sobre sus derechos y sus posibilidades de acceso a mecanismos de protección e inclusión comunitaria; se detectan sus necesidades y se les deriva a los servicios que puedan cubrirlas, como el sistema sanitario público.
También se prestan servicios básicos como conexión a internet, aseos, primeros auxilios psicológicos, ocio saludable; se organizan talleres y actividades participativas, actividades de refuerzo de capacidades, mejora del bienestar y habilidades para la transición a la vida adulta.
Nuestro apoyo a la infancia y la juventud migrante
Llevamos desde el año 2015 trabajando con las administraciones y la infancia en movimiento en los territorios que observan una mayor presión migratoria en el territorio español. Nuestra organización empezó nuestros programas en la ciudad autónoma de Melilla, y los ampliamos en 2018 para cubrir las llegadas marítimas en Andalucía, en 2020 en las islas Canarias y en 2021 en Ceuta.
Actualmente, en Andalucía atendemos a la infancia migrante sin referentes familiares en Algeciras, Granada, Málaga, Motril y Almería (en Cádiz y Sevilla llevamos a cabo proyectos de lucha contra la pobreza infantil). En 2022, atendimos en esta comunidad autónoma a unos 600 niños y niñas que llegaron solos; y en lo que va de 2023, ha atendido a 210. Málaga destaca especialmente como lugar de tránsito para niños, niñas y adolescentes que se encuentran fuera del Sistema de Protección de Menores o que han llegado haciendo risky, para ir a grandes capitales como Madrid, Barcelona o Bilbao. Si bien, en los casos de jóvenes extutelados, algunos se quedan en la ciudad.
Tenemos presencia en Gran Canaria desde el año 2020. Iniciamos nuestra actuación en Canarias a raíz de una de las crisis migratorias en ese momento, donde apoyamos al sistema de protección a la infancia con refuerzo de capacidades, detección de vulnerabilidades y enfoque de derechos.