Material multimedia (Fotografías y video de casos de familias en Filipinas): https://storycentral.savethechildren.org.uk/pages/search.php?search=%21collection54154&k=a5021270d9#
Informe completo (versión en inglés): "Sin presiones"
- Save the Children revela en su último informe que las seis principales compañías que comercializan leche de fórmula gastan 5.600 millones de euros cada año en publicidad (el equivalente a 40 euros por cada bebé nacido en el mundo).
- Las actividades de marketing de Nestlé, Danone, RB (Mead Johnson), Abbott, Kraft Heinz y FrieslandCampina violan sistemáticamente el código de la Organización Mundial de la Salud (OMS) establecido para detener el marketing agresivo dirigido a las nuevas madres.
- Save the Children hace un llamamiento a fabricantes, inversores y gobiernos para que se comprometan a poner fin a estas prácticas publicitarias.
- Los padres y madres son bombardeados con anuncios que incluyen falsas propiedades saludables y promociones en las redes sociales, mientras que los médicos denuncian que reciben regalos e incentivos para promover la leche de fórmula.
- El informe documenta que en solo dos décadas se ha multiplicado por cinco el crecimiento de la industria de la leche de fórmula – tres veces más rápido que la economía mundial – con más bebés alimentados de esta manera que nunca antes.
- En contraposición a la leche de fórmula, la leche materna ofrece todos los anticuerpos que un bebé necesita. 823.000 muertes de niños podrían prevenirse cada año mediante la lactancia materna universal.
Madrid, 27 de febrero de 2018: Save the Children revela hoy en un nuevo informe la escalada del marketing agresivo para los sustitutos de la leche materna, una práctica publicitaria que, en su mayoría, viola el código de la Organización Mundial de la Salud (OMS) creado para frenar este tipo de promociones engañosas.
Como resultado, millones de familias, muchas de ellas con bajos ingresos, están alimentando a sus bebés con leche de fórmula que no necesitan y a menudo no pueden pagar, poniendo en peligro la vida de innumerables niños.
El informe de la organización, “Sin presiones”, muestra que entre las seis principales compañías de leche de fórmula infantil - Nestlé, Danone, RB (Mead Johnson), Abbott, FrieslandCampina y Kraft Heinz- gastan cerca de 5.600 millones de euros en publicidad al año. Eso es el equivalente a más de 40€ por cada bebé nacido en el mundo.
El código de la OMS afirma que no debe haber "promoción al público" de sustitutos de la leche materna debido a la evidencia indiscutible de que la lactancia materna brinda a los niños el mejor comienzo en la vida. En este sentido, la leche materna ofrece todos los anticuerpos que un bebé necesita para evitar enfermedades mortales como la neumonía, que mata a más niños menores de cinco años que cualquier otra enfermedad.
Entre otras violaciones del código de la OMS, Save the Children señala que, por ejemplo, en Bangladesh los médicos privados describieron visitas mensuales en su mayoría de representantes de Nestlé e informaron haber recibido regalos e invitaciones a formaciones al menos una vez al año. En Tailandia, Dumex, propiedad de Danone, envió mensajes de texto promocionales a las madres. "Proporcione Dumex Dugrow 1 plus para niños de 1 año en adelante ... Esto ayuda a su hijo a estar fuerte y feliz. Llame para obtener una muestra gratis al 02-740-3400”, es uno de los textos enviados.
Se estima que 823.000 muertes de niños se evitarían cada año si casi todos los bebés fueran amamantados. Eso es prácticamente una de cada siete muertes de niños menores de cinco años a nivel mundial. Los bebés que no son amamantados tienen nueve veces más probabilidades de morir por neumonía que los que sí lo son.
"Las compañías están usando deliberadamente un marketing muy agresivo para transmitir la idea engañosa de que la leche de fórmula es mejor que la práctica de la lactancia materna. Nunca antes la alimentación de bebés y niños pequeños ha cambiado tan dramáticamente y a tal escala”, señala Andrés Conde, director general de Save the Children España.
"Es una cuestión de vida o muerte: muchos bebés de entornos de ingresos bajos y medios están muriendo como resultado de sustituir la lactancia materna por la leche de fórmula”, añade Conde.
Las ventas de la fórmula artificial están en auge. En 1998 el negocio de la leche de fórmula alcanzó un valor de 12.500 millones de euros; en 2014 de 36.500 millones y está previsto que llegue a 57.000 millones de euros en 2019. Esto supone un incremento por cinco en poco más de dos décadas, tres veces más rápido que el crecimiento de la economía global.
El informe de hoy no niega que la leche de fórmula no desempeñe un papel positivo en las condiciones adecuadas. Existe una necesidad médica reconocida para que algunos bebés sean alimentados de esta manera, y por distintas razones es una elección que hacen padres de todo el mundo. En cambio, se muestra una clara evidencia de que estas seis compañías están llevando a cabo potentes campañas de publicidad que contrarrestan las pautas establecidas, a menudo al afirmar una supuesta 'equivalencia' entre la leche materna y la leche de fórmula. El resultado de esto es que madres sin la información correcta limitan o abandonan por completo la lactancia materna.
Los seis fabricantes también se han vuelto cada vez más sofisticados en el uso de las redes sociales. Facebook, Instagram y otros canales digitales han permitido a las empresas influir en los patrones de comportamiento del consumo de los productos de una manera nunca antes posible, y que cada vez son más difíciles de controlar y regular.
La inversión en lactancia materna no solo sería un beneficio para la salud de los bebés sino que también refuerza el rendimiento escolar y las oportunidades de futuro para estos niños.
Save the Children pide:
- Que los directores ejecutivos de estas empresas se comprometan de manera pública a mantener y cumplir el código de la OMS.
- Que los inversores de estas compañías reconozcan que la publicidad agresiva perjudica a las familias, los bebés y los niños pequeños en todo el mundo y que utilicen su influencia para alentar a las empresas a cumplir con el código.
- Que los gobiernos incorporen el código y las consiguientes resoluciones en sus leyes y reglamentos, e inviertan en su aplicación y seguimiento.
Notas a los editores:
- Entre RB, Abbott, Kraft Heinz, FrieslandCampina, Danone y Nestlé juntos poseen más del 50% del mercado de sustitutivos de la leche materna.
- El Código Internacional de Comercialización de Sustitutivos de la Leche Materna de la Asamblea Mundial de la Salud exige:
- No promoción al público.
- No dar obsequios a las madres o los trabajadores de la salud.
- No hacer promoción en los centros de salud o para los trabajadores de la salud.
- No dar muestras gratis o suministros a mujeres embarazadas o madres de bebés y niños pequeños, sus familias o trabajadores de salud.
- No promocionar complementos alimenticios antes de que sean necesarios.
- No patrocinar reuniones de profesionales de la salud o reuniones científicas de empresas.
- Etiquetas adecuadas.
- Las empresas deben cumplir con el código, independientemente de otras medidas tomadas para su implementación.
- Solo algunas violaciones al código son ilegales en algunos países. En marzo de 2016, solo 39 países tenían una legislación integral que refleja todas o la mayoría de las disposiciones del código. Hasta el día de hoy, 49 países no han incluido disposiciones para el código en sus normativas.
- La lactancia materna es vital para prevenir la neumonía, que mata a dos niños menores de cinco años cada minuto. Esto supone más que la malaria, la diarrea y el sarampión juntos. Save the Children ha lanzado una campaña mundial contra la neumonía, que tiene como objetivo salvar un millón de vidas en los próximos cinco años.
- Save the Children ayuda a las madres a amamantar en contextos de desarrollo y emergencia en todo el mundo, asegurando que tengan la información y el apoyo que necesitan para tomar las mejores decisiones para sus bebés.
Sobre Save the Children
Save the Children es la organización independiente líder en la defensa de los derechos de la infancia en todo el mundo. Trabaja en más de 120 países salvando vidas, proporcionando seguridad y protección a los niños y las niñas y defendiendo sus derechos en el marco de la Convención sobre los Derechos del Niño de Naciones Unidas.
En España trabaja desde hace más de 20 años con programas de atención a los niños y niñas más vulnerables, centrados en la infancia en riesgo de pobreza o exclusión social. A través de sus programas en España, proporcionan una atención integral a los niños, niñas y sus familias para que la situación económica o de exclusión social en la que viven los niños no les impida disfrutar plenamente de sus derechos y puedan alcanzar el máximo de sus capacidades.