La sonrisa como terapia
Un blog de Pedro Armestre para Save the Children
Europa se enfrenta a la peor crisis de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial. Los niños que están sufriendo esta situación necesitan ayuda urgente. Más de un tercio de los refugiados que hacen el peligroso viaje entre Turquía y Grecia son niños.
Mientras Europa cierra sus fronteras y da la espalda a los refugiados, nosotros reafirmamos nuestro compromiso de hacer todo lo posible para salvar la vida de los niños y las niñas y de luchar por sus derechos.
Save the Children quiere dar voz a algunos de los grandes fotógrafos que nos han ayudado a llamar la atención mundial sobre la situación de los niños y sus familias que huyen de la guerra en Siria.
El fotógrafo español Pedro Armestre comparte aquí sus imágenes preferidas de su viaje a Lesbos (Grecia) para mostrar el trabajo que Save the Children está ofreciendo a los niños facilitándoles protección, ayuda alimentaria y apoyo psicológico tras el violento viaje que se ven obligados a realizar.
Sus fotografías y sus palabras nos acercan esta realidad pero también a su propia vivencia documentándolo. Esta es la mirada y la experiencia de Pedro Armestre.
La fotografía crea nuevos puntos de vista del mundo en el que vivimos
Con el tiempo he descubierto que mi interés fotográfico sólo es la llave para encontrar respuestas y aclarar mis dudas. Esa curiosidad y las respuestas que encuentro puedo compartirlas gracias a la fotografía. La fotografía, que tiene un lenguaje universal, me permite llegar más lejos. Y en cierto modo me permite contribuir a aportar nuevos puntos de vista del mundo en el que vivimos.
Viajando a Lesbos
Este viaje a Lesbos ha sido el segundo que he hecho con Save the Children para enfrentarme al drama de los refugiados que huyen de la guerra. Anteriormente he documentado a los refugiados sirios que llegan a Europa por la frontera sur (Melilla, España). Siempre he dicho que los niños de hoy son los que manejarán el mundo de mañana.
Promover valores éticos, la protección necesaria y los cuidados a esas pequeñas generaciones, como lo hace Save the Children, contribuye a construir un mundo menos inhóspito para todos. Me parece una labor imprescindible y fantástica.
Un interés macroeconómico
Cuando llegas a Grecia te enfrentas de golpe con la realidad. Descubres que tus sospechas son ciertas. Que la moralidad política no existe cuando los intereses reales son macroeconómicos. Y que, por desgracia, los mismos errores se repiten continuamente a lo largo de la historia. Que el refugiado huye gracias a las mafias, y que éstas están de facto permitidas por las autoridades cuando simplemente miran hacia otro lado. Que el refugiado es tratado como un delincuente. Ellos necesitan apoyo y sin embargo sólo encuentran rechazo. Los niños son el eslabón más frágil de la cadena de este drama.
La sonrisa como terapia
En situaciones dramáticas, la sonrisa es una terapia para continuar y ser positivos en la vida. Debemos fijar la mirada en los niños, para que disfruten de sus derechos y seguridad con una protección adecuada. Ellos tienen esa capacidad infantil de sonreír ante los dramas que los adultos nunca deberíamos perder. La ilusión.
Sentir para transmitir
Una de las premisas para crear mis imágenes es “Sentir para transmitir”. Eso te hace muy vulnerable. Pretendes imprimir en las imágenes tus sensaciones para conseguir una reacción en quien lo ve desde lejos desde la comodidad de un sillón. Si lo consigues, el propósito está cumplido.
Una imagen puede conseguir llegar muy lejos y sensibilizar, ayudar a conseguir fondos para que especialistas y profesionales puedan realizar su labor en el terreno. Eso ya es una gran ayuda, pero si llega el momento en el que me encuentro cara a cara frente a una situación donde no existan otras manos para auxiliar dejo la cámara para ayudar en lo que pueda.
Ya habrá más momentos para hacer fotos y continuar con mi labor.
En mi trabajo también siento preocupación, pero para mí significa mantenerte alerta y no bajar la guardia. Y el temor, aunque puede existir en determinadas ocasiones, tiene que estar bien canalizado, sin dejar que me bloquee y me permita seguir con mi función.
Decisiones que marcan vidas
Los reportajes sociales y medioambientales se tratan como dos temáticas diferenciadas cuando siempre he pensado que irremediablemente están unidas. Cualquier práctica que desarrollemos sobre el medio ambiente tiene un efecto directo sobre los seres humanos. Las políticas aplicadas y los intereses económicos distancian a los seres humanos y también nos alejan del medio en el que vivimos. Estoy muy interesado en las personas humildes y sus múltiples problemas, en esas personas que no tienen la capacidad de alzar la voz y si lo hacen nadie les escucha.
Trabajando juntos con Save the Children
Cuando recibo un encargo considero que soy uno más de la organización por un periodo concreto. Nos fusionamos para aportar lo mejor de cada uno y sumando, crecer juntos. Las imágenes, gracias a Save the Children, tienen una difusión internacional y en distintos medios de comunicación. Esta ventaja contribuye a un mejor conocimiento de las campañas de la organización y se suma a una mejora en las condiciones de vida de los niños desfavorecidos del mundo. Me reconforta pensar que puedo aportar un minúsculo grano de arena para contribuir a una vida más digna para la infancia.
Mi próximo viaje
Turquía. Qué está ocurriendo en Turquía ¿Y en los otros puntos desde dónde salen las embarcaciones? La ruta del sur. Ya estuvimos trabajando en Nador (Marruecos) documentando el periplo de los refugiados pero es una ruta de la que poco se habla y por lo tanto permanece invisible. Las condiciones extremas a las que el gobierno sueco obliga a vivir a los refugiados en la estación de esquí de Riksgransen. Sobre todo documentar situaciones de las que la prensa aún no se hace eco y así despertar su interés. Esas situaciones proporcionan material nuevo e inédito. Generamos información de primera mano para que luego los medios de comunicación tomen las riendas. Tengo la sensación de que los medios, en determinadas crisis, sólo informan acerca de lo que otros ya han hablado antes. Ir abriendo camino proporcionando nuevas historias es convertir a Save the Children en una fuente de información más valiosa de lo que ya es.
Ningún niño merece vivir asustado y sin hogar. Los niños que llegan a Europa necesitan nuestra ayuda.