Por una escuela libre de acoso escolar y de ciberacoso
Compartimos algunos consejos y pautas para los profesores y la comunidad educativa
Para la prevención de acoso escolar es necesaria la implicación de toda la comunidad educativa y la participación y el diálogo de los niños, las niñas, las familias, el profesorado y otros agentes sociales presentes en el barrio donde se inserta la escuela.
Compartimos algunos consejos que pueden ayudar a los profesores y profesoras a identificar el problema y prevenirlo.
- Los patios de recreo deben ser espacios de relación positiva, con una vigilancia adecuada y juegos cooperativos.
- Para actuar de manera adecuada es necesario conocer los mecanismos de protección de la infancia (protocolos de actuación en situaciones de violencia dentro y fuera del ámbito educativo).
- Educar en derechos a los niños y niñas previene la violencia entre pares.
- Propiciar en los estudiantes la identificación y superación de estereotipos y prejuicios para promover relaciones basadas en el respeto.
- Realizar actividades específicas de sensibilización en el tema de la violencia y la convivencia.
- Desarrollar en los niños y niñas habilidades personales para: – Promover la empatía. Buscando siempre el apoyo a la víctima y el rechazo de todas las actitudes violentas.
- Fomentar la cohesión entre compañeros y las relaciones basadas en la solidaridad y el respeto mutuo. Un niño o niña que tenga amigos difícilmente será acosado.
- Identificar las situaciones de violencia.
- Expresar emociones para liberarse del sufrimiento y encontrar a personas que les ayuden.
- Buscar y solicitar ayuda: No ocultar lo que sucede
- Ser asertivo: Defender los derechos sin vulnerar los de los demás.
- Denunciar: Aprender que la denuncia es un paso necesario para superar las experiencias injustas y evitar otros delitos.
- Diseñar estrategias educativas en el uso responsable y seguro de la red.
- Cuando se ha identfificado que existe el problema, no minimizar la gravedad de las agresiones y observar de manera sistemática al niño o niña en todos los espacios.
- Informar al tutor y al equipo directivo del centro, mediante una hoja de observación, donde se recojan los hechos y los implicados con la mayor precisión posible. Intentar actuar lo más inmediatamente posible, tomando las medidas acordadas y dialogadas con la comunidad educativa para proteger a la víctima.
- Hacer intervenciones individuales con las personas involucradas, las víctimas, los agresores y los observadores.
- No hacer mediación, porque se trata de una situación en la que existe un desequilibrio de poder.
- No culpabilizar ni a la víctima ni a los agresores ya que puede acrecentar la intimidación y provocar resentimiento.
- Intervenir con todo el grupo para que las actitudes y conductas negativas sean rechazadas por todos y todas.
- Respetar el derecho del niño o la niña a elegir la persona a quien desee contarle el problema. Es importante que haya una persona de referencia y que no se le pida que cuente varias veces lo que le sucede para evitar la revictimización
Descarga en PDF el documento con consejos sobre acoso escolar y ciberacoso para profesores.