Más de 700 niños inmigrantes no acompañados siguen en los centros de recepción inicial de las costas italianas
88 niños han sido trasladados a centros de protección de menores u hogares de acogida en Sicilia en los últimos días, pero el número de inmigrantes que cruza el Mediterráneo y llega a las costas italianas no para de crecer. Este último grupo de niños ha sido transferido en ferry desde el centro de recepción inicial en Lampedusa hasta Sicilia.
Los niños, de los que 85 viajaban solos, habían pasado casi dos semanas en una instalación diseñada para acomodar a gente durante 48 horas, debido a las condiciones meteorológicas adversas que han afectado al servicio de ferry desde y hacia Lampedusa.
Hasta la fecha, más de 700 menores no acompañados están aún viviendo en los centros de recepción inicial en Italia mientras esperan a que les encuentren un hogar adecuado donde comenzar el proceso de integración en la sociedad italiana.
El traspaso de estos niños se produjo poco antes de la llegada el pasado 4 de marzo de casi mil inmigrantes en 24 horas, entre ellos niños. Al menos 10 personas murieron después de que su barco se hundiera.
El viaje de estos niños muchas veces implica cruzar desiertos y zonas de guerra antes de la travesía en mar hasta Europa. Durante el viaje se enfrentan a deshidratación y desnutrición, secuestros, detenciones y extorsiones, torturas, esclavitud, trata o abuso sexual, todo sin sus familias”
Ana Sastre, nuestra Directora de Sensibilización y Políticas de Infancia.
Es básico que el rescate de inmigrantes en el mar sea una prioridad para Italia y para Europa y que la Unión Europea fortalezca su capacidad de búsqueda y misiones de rescate, ya que ahora hay más gente que nunca arriesgando sus vidas en este viaje.
Niños entrevistados por los nuestros equipos en Lampedusa cuentan historias estremecedoras, desde el viaje de su país de origen hasta Libia y luego en barco hasta Italia. Muchas veces sufren grandes traumas antes de llegar y algunos están tan desorientados que no saben a dónde han llegado.
Algunos niños han sido explotados y abusados por traficantes y otros cuentan que han sido esposados y han sufrido palizas en celdas de detención en Libia hasta que sus familias han podido enviar dinero para que pudieran hacer el viaje a Italia.
Los barcos ilegales en los que viajan están sobresaturados, a punto de hundirse y se rompen frecuentemente en medio del mar. Un niño de 16 años nos contó que vio cómo tiraban al mar a gente que iba en el barco porque estaban débiles o enfermos.
La mayoría de los niños no acompañados que han llegado a Italia en barco este año, a través de Libia, son de Eritrea y Somalia, mientras que otros son de África Subsahariana y el oeste de África, incluyendo Gambia, Mali, Costa de Marfil, Senegal, Nigeria y Guinea. La mayoría de las los niños que llegan acompañados por sus padres son sirios.
Los centros de recepción en Lampedusa
Cuando los migrantes llegan, no solo les acompañamos en los centros, sino que ayudamos a los niños que llegan a que conozcan sus derechos y que sepan qué pueden hacer en su nueva vida.
Aman* es mediador cultural de Save the Children en Lampedusa, donde los inmigrantes han llegado en barco desde Libia de miles en miles desde principios del 2015, muchos son mujeres, y niños con y sin acompañamiento. Muchos huyen de la persecución y la violencia con la esperanza de encontrar una vida mejor en Europa.
Yusuf*, 17, de Gaza con su mejor amigo Ahmed, 16, en el centro de Lampedusa, Italia.
Me fui de Gaza con mi mejor amigo por Líbano. Nos conocemos desde que somos pequeños. Cuando llegamos a Líbano nos quedamos en campos de refugiados con otras familias”
Nos pusieron en un barco donde el “capitán” nos dijo que íbamos a Italia. Teníamos que comprar nuestros propios chalecos salvavidas, los que no podían permitirse uno no llevaban chaleco. éramos como 250 personas en el barco, había dos pisos y muchos africanos fueron abajo. Los traficantes tenían pistolas y si hablabas te decían que te iban a disparar o tirar por la borda. Siempre nos amenazaban con pistolas.”
Yusuf, espera con otros 87 menores sin acompañamiento en el puerto de Lampedusa, Italia, para ser llevado a Sicilia donde ira a una casa de niños para empezar a integrarse en la vida italiana.
Su siguiente paso es subir a un ferry en Lampedusa que les llevará a Sicilia donde serán acogidos en hogares infantiles con la idea de integrarles en la vida italiana a largo plazo
Actualmente contamos con un programa en Italia para identificar las necesidades individuales de los niños y referirlos a las instituciones apropiadas para asegurar su protección. También vigilamos y monitorizamos el servicio en las diversas instalaciones a los que los menores son transferidos.
En Roma y Milán, estamos proporcionando artículos básicos -higiene, cambios de ropa y comida-, servicios sanitarios, asesoramiento legal, apoyo para contactar con familiares y actividades educativas y de ocio para los niños.