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Iluminando el presente de la infancia en Euskadi

Si hablamos de educación en el País Vasco, donde 1 de cada 5 niños y niñas vive en riesgo de pobreza o exclusión social (1 de cada 3 en España), las tasas de repetición, abandono, fracaso escolar y absentismo son menos alarmantes que en el resto del Estado. Así se desprende del último informe publicado por Save the Children, Iluminando el futuro: invertir en educación es luchar contra la pobreza infantil.

A nivel estatal, 1 de cada 3 estudiantes a los 15 años ha repetido al menos una vez curso y alrededor del 30% de los alumnos de secundaria no obtiene el graduado de la ESO; en el País Vasco, este porcentaje desciende al 14%. Por otro lado, las tasas de abandono escolar temprano española (23,5%) y europea (12%) son muy superiores a la vasca (9,9%), que cumple con el objetivo europeo del 10% para el año 2020.

En el Paías Vasco también hay niños y niñas que están viendo vulnerados sus derechos y limitadas sus oportunidades educativas y, por lo tanto, de futuro"

Estos son algunos de los indicadores que se recogen en el Índice de Equidad Educativa que hemos elaborado. Del análisis se concluye que en el País Vasco hay razones para “sacar pecho” en materia de educación. De hecho, es la comunidad autónoma con el nivel de equidad educativa más alto, siendo la única, además, con esta consideración. El sistema educativo en Euskadi, tal y como está concebido y estructurado, permite en mayor medida que otras comunidades y ciudades autónomas que, al final del trayecto educativo, alumnos y alumnas que tenían condiciones de partida muy diferentes obtengan resultados similares.

Pero la realidad no siempre es tan bonita como la pintan, más cuando detrás de cada cifra, por pequeña que sea, hay niños y niñas que están viendo vulnerados sus derechos y limitadas sus oportunidades educativas y, por lo tanto, de futuro.

A pesar de que el País Vasco lidera los indicadores analizados para la elaboración del Índice de Equidad Educativa, tanto en comparación con otras comunidades y ciudades autónomas, como en el cumplimiento de indicadores marcados por la Comisión Europea, existen algunos elementos que deben considerarse como desafíos futuros de las políticas educativas vascas. De hecho, estas cuestiones ya han sido incluidas en algunos informes de instituciones muy representativas, como el Ararteko y el Consejo Escolar Vasco. Nos referimos al notable incremento de la situación de pobreza en el País Vasco, sobre todo entre los menores de 18 años (que alcanza al 19,3% de la población infantil); al incremento del gasto por hogar en educación, que en el País Vasco se eleva a 522 € frente a la media estatal de 361€; y al descenso del 2,9% en la inversión en políticas de educación desde el año 2008.

El Consejo Escolar de Euskadi ya alertaba en el Informe La educación en Euskadi 2012-2013 que los principales recortes que se están produciendo en el sistema educativo vasco afectan a la educación pública. Señalaba también que el Gobierno Vasco debe dotar al alumnado en riesgo de exclusión social y a los centros educativos con un perfil socioeconómico más bajo «de los recursos que les permitan compensar los déficits de origen y alcanzar los niveles de desarrollo de competencias» que debe lograr el conjunto del alumnado.

Así mismo, coincidiendo con la publicación del Informe de Save the Children, el Ararteko presentaba en el Parlamento Vasco el Informe Anual de la Oficina de Infancia y Adolescencia, donde se incide en algunas cuestiones señaladas por Save the Children: el incremento de la pobreza infantil y la necesidad de mejorar el acceso a becas escolares, invertir en la mejora de las infraestructuras educativas y adecuar los horarios escolares para facilitar la conciliación familiar, entre otras.

Este contexto de pobreza infantil y desventaja social exige en el País Vasco una estrategia de inversión en los sistemas educativos: invertir en educación es invertir en infancia, es luchar contra la pobreza y es crear una sociedad mejor.