Desnutrición y guerra en Yemen
Según el último análisis que hemos realizado en Save the Children, cerca de 85.000 niños menores de cinco años podrían haber muerto de hambre o enfermedad desde que se intensificó la guerra en Yemen.
Utilizando datos recogidos por Naciones Unidas, hemos evaluado las tasas de mortalidad por casos no tratados de desnutrición aguda grave en niños menores de cinco años. Haciendo una estimación conservadora, sabemos que 84.701 niños con desnutrición aguda grave podrían haber muerto entre abril de 2015 y marzo de 2019.
Las consecuencias de la guerra en yemen
El difícil acceso a los hospitales, la falta de alimentos, la escasez de medicamentos hace que la guerra en Yemen esté desencadenando un preocupante número de casos de desnutrición en niños y niñas. Después de cuatro años desde que el brutal conflicto en Yemen se intensificó, cerca de 14 millones de personas corren el riesgo de sufrir una hambruna. Esta cifra ha aumentado dramáticamente desde que la coalición liderada por Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos impuso un bloqueo de un mes a Yemen en diciembre de 2017.
Desde entonces, las importaciones comerciales de alimentos a través del puerto de Hodeidah se han reducido en más de 55.000 toneladas métricas por mes. Eso es suficiente para satisfacer las necesidades de 4,4 millones de personas, incluidos 2,2 millones de niños. Cualquier disminución adicional en las importaciones podría llevar directamente al hambre.
La cifra de niños y niñas que han podido morir en Yemen por desnutrición es horrible. Por cada niño muerto a causa de las bombas y las balas, docenas mueren de hambre, algo que es completamente prevenible. Los niños que mueren de esta manera sufren enormemente a medida que las funciones de sus órganos vitales disminuyen la velocidad y finalmente se detienen. Sus sistemas inmunológicos son tan débiles que son más propensos a las infecciones y algunos están demasiado débiles incluso para llorar. Los padres tienen que presenciar cómo sus hijos se van consumiendo, incapaces de hacer nada al respecto.
La historia de Nusair*
Nusair* tiene 13 meses y se está recuperando de la desnutrición en su casa en Hodeidah, Yemen. En agosto Nusair fue tratado en una clínica que estábamos apoyando. Cuando terminó su tratamiento, él y su familia se fueron desplazando a medida que aumentaba el conflicto en su vecindario y dejaba de ser seguro vivir allí.
El pequeño Nusair volvió a enfermar, pero en esta ocasión su madre Suad* no podía permitirse desplazarse a un hospital ni comprar complementos alimenticios, así que su estado de salud se deterioró sustancialmente.
Cuando un equipo de Save the Children encontró a Nusair para darle seguimiento, él estaba muy desnutrido nuevamente. Nuestro equipo sanitario lo remitió al hospital y proporcionamos transporte y alimentos para ayudar a Suad a cuidar de su familia.
Luchando contra la desnutrición
Desde el inicio de la guerra hemos proporcionado alimento a 150.000 niños y tratado a más de 78.000 con desnutrición. Los combates, los bloqueos y la burocracia nos han obligado a llevar suministros vitales al norte del país a través del puerto sur de Adén. Esto significa que la ayuda puede tardar hasta tres semanas en llegar a las personas en lugar de la semana que costaría si el puerto de Hodeidah estuviera en pleno funcionamiento.
También hemos observado un incremento dramático en los ataques aéreos en Hodeidah en las últimas semanas, así como de un aumento de los combates en Taiz, Saada y Sanaa.
Necesitamos con urgencia obtener alimentos con alto contenido de nutrientes para los niños más vulnerables de Yemen, algunos de los cuales están realmente al borde del abismo. Con 50 euros podemos alimentar a una familia de siete miembros durante un mes entero. Un solo niño que muera de hambre es demasiado.